Thor

...ayer tuve que sacrificar a mi gato.

Lo recogí de la calle cuando apenas tenía un mes. El veterinario me dijo que se moria esa noche, pero se recuperó. Sin embargo, le diagnosticaron una enfermedad muy grave, por haber estado en la calle; PIF. Es como tener Sida pero en los gatos. Le he cuidado, le he dado todos los tratamientos posibles, he cuidado de el como si hubiera salido de mi propia barriga y era, realmente, lo que más queria en el mundo. Eramos uno. Si yo lloraba, él estaba ahí.
Ahora tenia 4 años, los cumplía el 7 del mes que viene. No he podido darle una vida más larga, he hecho todo lo que estaba en mi mano...pero estos dias estaba muy mal, se habia adelgazado de una manera brutal y le hicimos una eco que nos reveló que tenia dos tumores, uno en el colon y otro en la barriga. La veterinaria me dijo que con quimio podia durar unos 6 meses más, pero que le hirian saliendo más tumores...y sufriria. Ahora aún no estaba sufriendo...así que decidir lo mejor para él. Lo sacrifiqué antes de que sintiera más dolor, porque a decir verdad, las patas de atrás apenas las podia mantener de pie,aunque seguia mimandome igual.
Ha sido, quizá, el golpe más duro que me he llevado en la vida, y os aseguro que no han sido pocos.

Así pues, le dedico hoy esta entrada para decirle adiós....y que siempre te querré Thor.