El odio lleva a la ira, o la ira al odio. El orden del factor no altera el producto, almenos en este caso. Eso es un sentimiento, o dos, depende de como lo consideremos. Y son demasiados para nada. Aunque la nada ya es algo y el algo es valor y el valor sigue sin equivaler a indiferencia. Aunque por esa regla de tres, indiferencia es una palabra y tambien es algo. Faltan palabras que definan la nada de verdad. Iba a decir vacío, pero en el vacío hay particulas, protones y no se que más físico. Lo físico invible al ojo es lo importante. Lo demás, son solo minucias. Los recuerdos son invisibles al ojo pero no a la mente. La mente crea peliculas y las reproduce una y otra vez a su antojo. Yo no quiero recrear peliculas. Yo lo que quiero es que los negativos queden borrosos por la lluvia. Pero esa no es la via, la lluvia de odio e ira solo hace que el relieve de los negativos se acentuen y haga replay una y otra vez.
mañana em levantaré, dejaré en un rincón las peliculas en blanco y negro y cogeré una cinta nueva, que impida que ruede ninguna más que ella misma, en único carril y sin desviarse. Si, haré eso.
PD: A todo esto, ya me he hecho un poco más vieja, cumplí 22 años hace muy poco.
02 marzo 2010
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