24 diciembre 2008

Ya no se como decírtelo.

Busco en mi subconsciente lo diáfano de la realidad que me une a ti.
Rehúso del tiempo que transcurre entre un suceder y otro.
Discurro sobre el momento en el que fue y divago sobre el porque.
No tengo la más mínima idea de en que momento me perdí.
Intento sin exito pero con meta postergar los recuerdos.
Sin más remilgos que me delaten continuo mirando atrás.
Derribo los óbices uno tras a otro para llegar.
Y luego me doy cuenta de que quizá deba quedarme aquí...


Ya no se como decírtelo.





http://www.youtube.com/watch?v=zhpqXbndFvQ - Stop and Stare

22 diciembre 2008

Carta desconocida


Te mando una carta sin nombre en el dorso, para que almenos así la habras.
Te escribo cuatro frases sencillas, para que puedas entenderlas mejor.
No te preocupes, olvidaré poner mi nombre para que tengas excusa para no responder.
Olvidaré también poner la fecha, así podrás dejarla en un rincón todo el tiempo que quieras y jamás tendrás la sensación de que es tarde para leerla.
Procuraré ponerlo todo en negrita y subrayado, para que sepas que cada palabra trazada es secillamente importante.
Usaré papel reciclado, el mismo que utilizastes aquella vez para dibujarme/nos, así no te centrarás más en los árboles que en mí.
Quien sabe, quizá con un poco de suerte la pierde el cartero.
De todos modos, intentaré dejármela encima de la mesa antes de salir a echarla, así seguro que jamás la leerás, y te ahorro las molestias de hacerlo.
Sí, seguramente haré eso, la dejaré en un montón como todas las demás.



21 diciembre 2008

Sobre el espiritu navideño...

Empiezo a odiar la navidad. Cada año se me hace más pesada. Será por las circunstancias que me rodean.
Me da tremenda pereza ir a ningun sitio los unicos días de fiesta que tengo, y ver caras llenas de hispocresía de gente que ya ni me va ni me viene, aunque sea de mi propia sangre. Es lo que tiene la vida, cuando piensas fríamente en las cosas que han ido sucediendo, al final haces tu propio camino. Y, a las navidades, que las zurzan. Al final todo son mentiras.
Ya le digo yo a Col que a mis hijas les contaré otro cuento que no sea el de la navidad. Es complicado porque la sociedad se encarga de meterselo bien en la cabeza...pero ya veremos, ya veremos.

Cuando yo era pequeña, tenía ilusión. Los niños de ahora...enfin, tendriais que oir lo que les van diciendo con 5 años sobre la navidad a sus padres. Y, no me extraña la verdad, con el tema consumista el tema se ha ido ya de las manos. Ya no es lo que era.

Enfin, quiero despertar mañana y que estemos ya en febrero, y todo vuelva a la normalidad.

16 diciembre 2008

Frío

El frío se cuela por debajo de mi jersey y hace mella en mí poco a poco. He pasado una noche horrible a causa de un costipado que no termina de salir pero que, por las noches no me deja dormir. Deámbulo por la oscuridad y el silencio de mi casa, voy a la cocina y me tomo un tazón de leche caliente, cojo pañuelos y me voy a la cama. Compruebo que efectivamente, sigo sin poder dormir y me incorporo para poder coger una mota del aire que se supone que hay en la habitación. Es amargo, frió, penetrante. Es traïdor porque hace que mi costipado augmente por momentos sin darme apenas cuenta. Se me caen los párpados mientras intento no olvidarme de respirar, ladeo la cabeza somnolienta...y al final caigo rendida.

Suena el despertador, y me recuerda que tengo que levantarme. Voy al baño y me ducho mientras pienso que ya no recuerdo cuál fue el último dia que tuve fiesta y que aún quedan muchos más para tenerla. El costipado no me deja hablar, tengo una voz ronca y irrisoria.
Paseo a los perros. Ellos también tienen frío, se les nota porque se apresuran en hacer sus necesidades y volverse a la puerta ellos solos. Y yo, se lo agradezco.

Cojo el metro y me embarco en un día más...de este frío invierno que se me está haciendo eterno.

15 diciembre 2008

Un paseo por la sección infantil...

Hoy hablaba con Super_y de que antes de trabajar en la sección de libros infantiles quería ser professora de éstos. Y digo antes, porque ahora he cambiado de opinión.
Veréis, no es que me hayan dejado de gustar los niños, si en verdad los adoro y se me cae la baba cuando los veo revolotear por la sección y desmontar el trabajo que he hecho en 6 horas con un solo minuto de su existencia. No, no es eso. No me molesta que pequeños saltamontes inconscientes del mundo ajeno desmonten lo que sea. Lo que realmente me molesta son sus padres. Me molesta ir detrás a decirle al padre "perdone, pero esto no se puede abrir.." y darme cuenta dos segundos después que ése mismo padre esta escondiendose detrás de una columna abriendo el libro pensandose que no le veo. Me saca de quicio, pero mucho. O mejor aún, el otro dia una niñita con unos rizos adorables y con apenas unos 4 años le dijo a su padre: "papá, donde estaba esto?" y el le dice (conmigo delante), "aquí mismo hija" y lo tira como quien tira algo a la basura en medio de una mesa donde hay expuesto otra cosa.
Mal, muy mal, así dan ganas de no tener hijos nunca.
Cuando yo era pequeña e iba a algun sitio No tocaba nada, y si lo hacía, miraba con ojos de pena a mi madre para ver si ella asentía, pero jamás lo abria y todo volvía a su sitio. ( y pobre de mi que no lo hiciera)

Enfin, es una pena, pero no quiero ser profe para guardar a los niños ( en vez de educarlos) mientras los padres van a trabajar. Porque al fin y al cabo, la mayoria de ellos, no colaboran en educar a sus hijos con los profesores.

Lo mejor será que me quede con la administración, aunque no me motive tanto...

11 diciembre 2008

Del buen sabor de boca..

Me encanta.
Me encanta la sensación que provocan algunas personas.
Es como si el tiempo no existiera para ciertas cosas. Un dia conoces a alguien extrañamente entrañable y te da la sensación de que no es la primera vez que la ves, aunque en realidad lo sea. Es como si llevaras hablando con esa persona desde la infancia o algo así. Hablas y hablas y el tiempo no existe y cuando te das cuenta ya tienes que decir adios. Te vas pensando que ha sido verdaderamente agradable y que es una pena que se haya terminado la comida tan pronto.
Y luego, al cabo de mucho tiempo, vuelves a ver a esa persona, vuelves a comer con ella y te das cuenta de que, en cierta forma, el tiempo no ha transcurrido, y de que sigues teniendo la misma confianza en esa persona que la primera vez, que curiosamente, resulta ser muy grande. Y si, vuelves a decir adiós, pero esta vez con la certeza de que la proxima vez que la veas, seguirá habiendo esa confianza de siempre, y con una sonrisa y un buen sabor de boca, te vas más contento que nunca a tu casa.

El blog desnuda a la gente por dentro, y a veces creo que conozco más a los que andan por aquí que a mi propia familia.

Como siempre, un placer comer contigo.

05 diciembre 2008

Escarcha


Las lágrimas son bien caprichosas. Cuando no quieres que estén, no te dejan en paz...y cuando las necesitas no hay manera de que se asomen.

Hay muchas formas de llorar; hay gente que lo hace de la risa, sin embargo, a mí, eso me cuesta mil. Hay pocas cosas que me hagan reír un montón.
Hay gente que llora de tristeza pero que es capaz de aguantarse hasta que nadie le vea. Que admiración tengo por ell@s.
Y, hay otra gente que llora sin querer, esté donde esté y a la hora que sea. Todo sobre la marcha.

Todo eso está muy bien, porque de una manera u otra, más sútil o menos, siempre te desahogas.
El problema verdadero viene cuando tienes ganas y no puedes. Cuando algo te molesta mucho y por dentro derramas millones de gotas diminutas y eres incapaz de exteriorizar ni una pizca de ellas. La rabia se acumula, se hace como un nudo y estas nervioso, porque quieres y no puedes. Porque áquello y lo de más allá te molesta tanto que quieres romper en llanto...y éstas se empeñan en quedarse guardadas. Y entonces te planteas...si no puedes llorar...será que por dentro verdaderamente no te molesta tanto? o es solo un escudo...una especie de caparazón de hielo que surge después de haberse golpeado un sinfin de veces? Si, será eso, será que tengo ya el caparazón lleno de escarcha. Será que por los costados se me estan formando grandes estalactitas dignas de ver.






[...Y yo solo quiero llorar y deshacer con mis lágrimas mis propias estalactitas para sentirme mejor de una vez...]

02 diciembre 2008

RE Querido Capitán

Querido Capitán:

El tiempo pasa...y no en vano. Es posible que haya envejecido un poco desde la última vez. La vida me ha robado un trozo de mi exasperada inocencia, aquella que tanto apreciaba usted en mí...pero le prometo que aún guardo una poca y de vez en cuando saco sonrisas con ella.
Antes me gustaba navegar, ya lo sabe usted muy bien. Ahora prefiero andar, o acaso volar. Ya sabe, me cansé del ir y venir de las olas, me aburrí de los ocasos vacíos, del rumbo hacia ninguna parte o del color de la vida que parecia sacada de un cuadro de mar.
Ya ve usted, a mi siempre me han dado miedo las alturas, pero he encontrado la manera de sentir las inclinaciones mucho mas suaves, y sobre todo de aterrizar como es debido.

Cada dia me acuerdo de usted. Llegaron rumores de que me estaba buscando, aunque le dí mi dirección y nunca vino a buscarme. Es una pena, mentiria si le dijera que no muero por darle un buen abrazo. Ya sabe, como los de antes, como cuando eramos todavía más jóvenes y las diferencias todavía no significaban nada para nosotros.

Enfin, no puedo decir nada más, solo que aquí me tiene de nuevo, para contarle desde el aire como van las cosas. Quien sabe, igual, hasta le gusta lo que le escribo.